¡Qué bueno es conocer más de Jesús en esta Navidad!  Vamos a explorar algunas doctrinas de las escrituras para entender mejor quién es Jesús.  Como creyentes en Él, somos participantes de todos los beneficios que nos dio al dar su vida en rescate de muchos.

Primero vamos a enfocar en la Santificación – Juan 17:18 “Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo. 19 Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad.”  Jesús nos ofrece el privilegio de estar purificados a través de su nacimiento, su muerte y su resurrección.  La palabra santificar significa  hacer [a uno] santo por medio de la gracia.  Somos santificados por la gracia de Dios.  Cristo es nuestra santificación.  Dice que “para que también ellos sean santificados en la verdad.” La única verdad es Jesucristo y podemos estar santificados en Él.

En segundo lugar tenemos la Redención – Efesios 1: 7 “En él tenemos la redención por medio de su sangre, el perdón de nuestros pecados, de acuerdo con las riquezas de la gracia.”  Nuestros pecados han sido limpiados por la sangre de Cristo.  ¡Qué buenas noticias de saber que no tengo que hacer nada ni tampoco merezco nada!.  Somos salvos por la pura gracia de Dios.

La tercer verdad es la Salvación – Hechos 4:12 – “De hecho, en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos».” No hay varias maneras de recibir la salvación. Hay una sola forma y es a través de la obra en la cruz.  Dios desea salvar a toda la humanidad.  Los hombres somos salvos por el gran plan del Padre que todos puedan llegar a conocer a Dios a través de su hijo Jesús.

La cuarta verdad que nos presenta Cristo es la Justificación – Romanos 4:25 “Él fue entregado a la muerte por nuestros pecados, y resucitó para nuestra justificación.” A lo mejor es una palabra difícil de entender pero estamos justos delante de Dios por la obra de Jesús.  Un diccionario dice  “convertirlo en justo, ya sea de acuerdo a la moral o la ley, o incluso a través de una demostración.”  Jesús nos convirtió como justos delante del Padre y dice e hizo una demostración.  Me encanta que dice Colosenses 2:15 “Desarmó a los poderes y a las potestades, y por medio de Cristo los humilló en público al exhibirlos en su desfile triunfal.” ¡¡Qué demostración en público para justificarnos!!

Lo ultimo que recibimos es una Adopción – Romanos 8:14 “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios. 15 Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar: «¡Abba! ¡Padre!»” Lo tremendo de esta verdad es saber que somos hijos de Dios por todo lo que Cristo hizo.  No somos esclavos del pecado, pero si somos adoptados por la obra de Jesús.  El plan de Dios para la santificación, la redención, la salvación, la justificación está culminado en la adopción como hijos de Dios.  Podemos llamarlo “Abba! Padre!” ¡Me da tanta seguridad ser parte de su familia!

Feliz Navidad,
Pastor Rocco